Para celebrar el día de los autores europeos hemos contado con la presencia del escritor y catedrático universitario Miguel Muro.
El profesor Miguel Ángel Muro es Doctor en Filosofía y Letras por la Universidad de Zaragoza y Catedrático de Universidad, en el área de Teoría de la Literatura y Literatura Comparada de la Universidad de La Rioja (España), donde ha dirigido el Máster de Didáctica del español como lengua segunda y lengua extranjera y ha coordinado el Programa de Doctorado en Humanidades.
La charla de Miguel Ángel versó sobre «Libros envinados». Aquí tenéis un resumen que el mismo autor nos ha hecho sobre lo tratado en su ponencia:
De entre el enorme caudal de libros y páginas literarias que sirven de recipiente al vino, me gustaría destacar algunas novelas en las que el vino, lejos de ser algo circunstancial o anecdótico o un motivo más entre otros (que es lo usual), se erige en parte fundamental de la trama, en ingrediente básico de los acontecimientos, en complemento irrenunciable de los personajes y sus peripecias. Estos son relatos macerados en vino, por cuyos renglones se extienden las viñas y por cuyas páginas corre el vino como por mangueras de trasiego. Estas novelas están escritas con vino, tratan sobre vino y rezuman vino por sus cuatro costados: huelen a mosto y pámpano, saben a uva y vino.
Uno de los relatos por cuyas páginas fluye más vino es la novela social de Vicente Blasco Ibáñez La bodega, que arroja una mirada crítica sobre los latifundios y la situación social de los jornaleros del campo, ambientada en Jerez de la Frontera y desarrollada entre viñas y bodegas, a finales del siglo XIX.
Si hay una novela empapada en vino con acierto en estas últimas décadas, esa es, sin duda, Sideways, quizá más conocida por la fiel adaptación cinematográfica que hizo de ella Alexander Payne (titulada Entre copas en España) y que supuso un éxito considerable en taquilla y, entre otros galardones, cinco nominaciones a los Oscar y la obtención del que se concede al mejor guion adaptado.
Aprovechando la corriente favorable a la cultura del vino de las últimas décadas y escribiendo a mayor gloria de la región y los vinos de Burdeos, los novelistas Alaux y Balen han creado unas historias policíacas ambientadas en esta región francesa cuyo protagonista es un famoso enólogo llamado Benjamin Cooker y donde el vino tiene gran presencia e importancia. Muerte entre los viñedos (Le sang de la vigne) es un relato flojo en torno a un enigmático asesinato.
Francisco Bescós ambienta en El porqué del color rojo un caso de asesinato en tierras de Rioja Baja y opta por el thriller comprometido al asomarse a las mafias que trafican con emigrantes temporeros en la época de vendimia con la complicidad de quienes los contratan. Como suele ser usual en este tipo de libros, este problema central se complica con asuntos de lucha antiterrorista, problemas causados por el yihadismo y los propios líos personales de su protagonista, la teniente Lucía Utrera (alias La Grande, por su tamaño) del cuartel de la guardia civil de Calahorra.
No hay comentarios:
Publicar un comentario